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 Historia

CiDESD de fundación en el año 2014 como entidad no gubernamental con carácter de persona jurídica asociativa, de utilidad común e interés social, sin ánimo de lucro, y de nacionalidad colombiana no es solo punto de partida sino de llegada de una reconocida trayectoria del denominado Observatorio de Derechos Sociales y Desarrollo en la ciudad de Cartagena de Indias.

Los Orígenes

El Centro Interdisciplinario de Derechos Sociales y Desarrollo, CiDESD, tiene sus orígenes en el proyecto Observatorio de Derechos Sociales y Desarrollo –ODESDO-, creado en el año 2007, como una iniciativa consorciada entre la Organización No Gubernamental ACCISOL (Acció per una Ciudadania Solidarià) con sede en Barcelona, Catalunya, (España) y Funsarep  Asociación Santa Rita para la Educación y Promocion) con sede en Cartagena de Indias (Colombia) con el propósito de analizar las dinámicas sociales y políticas del desarrollo local desde el seguimiento a los derechos humanos (civiles y políticos y DESCA) con perspectiva de género y étnica y enfoque territorial.
La fundación del ODESDO, durante el gobierno Uribe, debe ubicarse en ese contexto particular. Su creación respondió a la necesidad de encarar acciones oportunas y eficaces para visibilizar, denunciar y contrarrestar desde la ciudadanía activa y participación democrática las dinámicas de desigualdad social, inequidad de género, discriminación racial y la violación del derecho a la vida y de los derechos humanos, particularmente DESCA, que se daban sistemáticamente en los  procesos de desarrollo local en Bolívar y,  particularmente, en la ciudad de Cartagena de Indias, como ciudad que apostaba a ser el modelo del desarrollo turístico y de la apertura económica y portuaria. Al trabajo de generar información estratégica y análisis crítico para visibilizar, documentar, difundir y demandar la situación de desprotección en materia de derechos humanos e injusticia social en el desarrollo local, ODESDO añadió, la capacitación a líderes(as) y organizaciones y redes sociales y el trabajo de sensibilización social e incidencia política junto a las organizaciones no gubernamentales, movimientos sociales  y redes aliadas de la Ciudad y Departamento que buscaban la transformación de un modelo de desarrollo excluyente y  la erradicación de las injusticias que provoca la exclusión económica, la discriminación por género y el racismo estructural.

 Nuevos desafíos, ampliar agenda

CiDESD, atendiendo a la propia evolución del contexto y con el fin de darle un mayor alcance a las apuestas iniciadas desde el ODESDO, recoge la propuesta de ACCISOL, desde su  Red CEDRESD, para  promover y apoyar  entidades  que trabajen la promoción y protección  del derecho al desarrollo y la interdependencia entre derechos humanos , democracia y desarrollo en el marco de ampliar el conocimiento crítico de la situación social en el desarrollo y la democracia local, generar debate público y ejercer intervención e incidencia en las políticas públicas para mejorar la vida de la gente sin exclusiones.

CiDESD, no sólo recoge el legado y da continuidad al acumulado alcanzando con la intervención del ODESDO sino que entiende que resulta imprescindible en el nuevo contexto de paz y postconflicto que vive el país no  seguir haciendo “más de lo mismo”. Es necesario aunar esfuerzos para revertir  un modelo de desarrollo  que niega el derecho a tener derechos a una gran mayoría de personas, el respeto por  el medioambiente y el uso  compartido y equitativo de los recursos del territorio y del propio desarrollo.
Los principios democráticos y los DHESCA como eje sustantivo de la democracia están lejos de materializarse en el desarrollo local actual. Desde CiDESD, entendemos que la firma de la paz es muy importante, pero no basta. Debemos ampliar la agenda y participar activamente, junto a otros actores y actoras, en propuestas transformadoras con el objetivo de democratizar el desarrollo y sus instrumentos públicos para que se atienda las demandas históricas de la sociedad bolivarense, y en particular cartagenera a fin de lograr mayor justicia social, extender la ciuda-danía universal en el desarrollo local; mayor eficacia en la lucha contra la exclusión económica, los patrones patriarcales, la discriminación de género y el racismo. 

​CiDESD a través de distintos espacios y escenarios ha estado y seguirá comprometido con la Paz y al cultura de la No violencia. Ha apoyado siempre, decididamente,  la salida negociada al conflicto armado interno colombiano teniendo como centralidad los derechos de las victimas a la verdad, la justicia, la reparación y las garantías de no repetición. De la misma manera, considera que la paz se construye y será estable y duradera desde el imperativo ético de los derechos humanos en su integralidad e interdependencia con el desarrollo y la democracia; el respeto a la diversidad, a la igualdad y ciudadanía plena de todas y todos. Al respeto, CiDESD considera que la Paz es un derecho irrenunciable al que se debe apostar activamente y se constituye en un reto y una oportunidad en los próximos años para construir una sociedad colombiana más justa  y realmente equitativa e inclusiva.

​Equipo de larga trayectoria

Para ello CiDESD como organización no gubernamental cuenta desde su inicio con un equipo integrado por mujeres y hombres con amplia trayectoria personal y profesional  en el ámbito del desarrollo, la promoción de los derechos humanos y la ciudadanía; con reconocimiento social en las organizaciones sociales y en la ciudad; y con alto nivel de compromiso a favor de los sectores excluidos, grupos discriminados y victimas. Son personas con amplia participación en Funsarep, Accisol y en el equipo de ODESDO que garantizan el cumplimiento de los fines de la institución y su proyección  a favor de un desarrollo inclusivo y equitativo y de la expansión de los derechos políticos, económicos, sociales y culturales y ambientales para todas las personas

​CiDESD forma parte de la Red del Cedresd (Centre d¨Estudis pels Drets Socials i el Desenvolupament) de Accisol.  y colabora con otras organizaciones independientes de otros países con las que comparte unos mismos principios éticos y valores  para sumar esfuerzos en la promoción y defensa del derecho al desarrollo, la democracia y la vida digna para todas las personas y todos los pueblos.